. La embestida patronal contra los trabajadores de Petroquímica Río Tercero (PR3) sumó un nuevo capítulo el pasado miércoles 6 de agosto, fecha de pago de los salarios. La patronal presentó una extorsión al Sindicato Químico y Petroquímico de Río Tercero (SPIQyP Río III), proponiendo pagar solo el 50% de los salarios a cambio de que los trabajadores depongan la lucha contra los 124 despidos que la empresa efectuó a mediados de julio. Frente a la negativa obrera a aceptar los despidos, la patronal anunció y cumplió el no pago de la totalidad de los salarios, incluyendo a todo el personal. Recordemos que la secretaría de trabajo provincial de Omar Sereno impuso una Conciliación Obligatoria (CO) por la cuál todos los trabajadores tienen acceso a la planta, pero con la particularidad de que la empresa no les da tareas al haber parado a cero la producción, es decir, mantiene un lock out patronal ofensivo, a lo que ahora se suma el no pago de salarios. La CO sirve de cobertura al lock out y ayuda a la patronal en su estrategia de desgaste, demostrando una vez más el rol de la secretaría de trabajo en cada conflicto, jugando siempre para los empresarios. La empresa tiene en curso un Concurso Preventivo de Acreedores solicitado ante el tribunal en lo Comercial N.º 23 de la Ciudad de Buenos Aires y apuesta a ganar tiempo para meter a los salarios e incluso a las indemnizaciones devengadas en el barro del concurso de acreedores.
Frente a la nueva ofensiva que constituye el no pago de haberes, los trabajadores de PR3 definieron mantenerse firmes dentro de planta, superando la intentona de la policía provincial de Llaryora de impedir el ingreso del turno noche el mismo 6/8. La ocupación de la planta cobra vital importancia ya que plantea prácticamente el problema de saber quién es el dueño de la fábrica: el capitalista o los obreros; permite a los trabajadores ganar una posición de fuerza, aunque sea temporalmente ya que sabemos que la clase capitalista y las instituciones represivas del Estado a su servicio no pueden permitir esta afrenta a los “sacrosantos valores” de la propiedad privada de los medios de producción. Pero la pelea de PR3 no se da en el vacío, sino en medio de una profundización de la crisis capitalista a nivel internacional y de la crisis industrial pronunciada que atraviesa nuestro país como consecuencia de la política del gobierno del FMI que encabeza el títere Milei. La importancia de la lucha de los químicos de Río Tercero es que están mostrando un método para enfrentar los despidos a nivel nacional en medio de la crisis producida por la recesión y la apertura de las importaciones. La ocupación debe ser planteada como un hecho político que apueste a desarrollar una ola de ocupación de fábricas en todo el país; es sobre esa tendencia que la lucha de los trabajadores PR3 adquiere su dimensión y tiene posibilidades de desarrollarse en una perspectiva de triunfo.
Algunos sectores sindicales, que van desde la burocracia de la CGT a sectores combativos y al centrismo trotskista, caracterizan la apertura de importaciones y en general la política de desregulación económica de los nefastos ministros Caputo y Sturzenegger como una ofensiva contra la llamada industria nacional que llevaría a un “industricidio”. La realidad es que las patronales, tanto nacionales como imperialistas afincadas en Argentina, continúan aplaudiendo las medidas del gobierno y se aplican a reconvertir sus fábricas en centros de logística para el acopio y distribución de esas importaciones. No hay industria nacional que defender, lo que debe ser defendido son los salarios y las condiciones de trabajo de la clase obrera, que son el verdadero blanco de la política pro imperialista de Milei y su pandilla de ajustadores. A viva voz, la UIA, las Pymes, la AmCham y demás cámaras patronales plantean que “para poder competir” necesitan el avance de la reforma laboral. El objetivo del gobierno con su política es ponernos a competir con la clase obrera del resto de los países para bajar, acá y allá, los salarios y las condiciones de trabajo. Es por eso que debemos plantear, junto con el control obrero de las ramas como forma de mostrar el poder obrero y la capacidad de nuestra clase de enfrentar la desorganización de la economía capitalista, el Monopolio del Comercio Exterior, no como una medida nacionalista para unirnos a la burguesía nacional contra la producción extranjera, sino como una herramienta del poder obrero para defender a nuestra clase, en alianza con los trabajadores del resto del mundo, contra los ataques del imperialismo y sus socios menores.
Para combatir la ola de despidos y el aumento de la desocupación, que va de la mano con la degradación de las condiciones laborales para imponernos el pluriempleo y/o la extensión de las jornadas a 10, 12 o más horas, tenemos planteado imponer las escalas móviles de horas de trabajo y salarios a partir de nuestros métodos de lucha y de nuestras organizaciones: el control obrero y las organizaciones sindicales recuperadas de la burocracia. Las escalas móviles plantean, frente a la anarquía económica que imponen las leyes del capital, la transición al sistema de trabajo de una sociedad socialista, donde la producción se organice sobre nuevas bases sociales.
La lucha de los químicos de PR3 tiene que triunfar. Para eso, necesita la solidaridad del conjunto de la clase obrera y de los luchadores de Córdoba. Ante cualquier atisbo de desalojo, el movimiento estudiantil combativo que despuntó con la lucha universitaria del año pasado tiene planteado tomar las facultades. Y lo más importante, los sindicatos, juntas internas y cuerpos de delegados recuperados y los activistas combativos tenemos el compromiso de llevar esta discusión al interior de nuestros lugares de trabajo. Debemos discutir como enfrentar los despidos, el ataque al salario y a las condiciones de trabajo, para apoyar a los químicos de Rio Tercero y también para poner en pie de lucha al conjunto de nuestra clase frente a los ataques de las empresas, el gobierno nacional y los gobierno provincial y locales, con la complicidad de la burocracia sindical de las CGTs y las CTAs. Impulsemos asambleas en cada fábrica, escuela y lugar de trabajo; mocionemos un Congreso de Delegados con mandato de base de todo el movimiento obrero de Córdoba para discutir un programa y organizar el plan de lucha y el paro provincial.
El jueves 12 de junio, sindicatos, seccionales y comisiones internas recuperadas, junto a delegados, agrupaciones sindicales opositoras, agrupaciones estudiantiles, de jubilados y corrientes políticas de izquierda, llamamos a un plenario provincial de trabajadores en la sede del sindicato de Luz y Fuerza de Córdoba.
La iniciativa se viene forjando a partir de las experiencias de lucha de los últimos años, como la de los docentes provinciales que recuperaron la delegación Capital de UEPC, los Químicos y Petroquímicos de Rio Tercero que enfrentaron sucesivas embestidas patronales y ATE CONICET, junta interna puesta en pie el año pasado al calor del enfrentamiento a la ofensiva del gobierno nacional contra los trabajadores de ciencia y técnica. A estos procesos, se suman un gran número de sectores de trabajadores que irrumpieron en la situación provincial en los últimos meses con conflictos por salario y contra los despidos: judiciales, trabajadores de los hospitales, de EPEC, metalúrgicos, universitarios, jubilados, entre otros. Son parte de un proceso provincial a partir de la crisis y el ajuste del gobierno de Llaryora que se entrelaza con las luchas que recorren todo el país, desde los docentes de Misiones y Catamarca hasta los metalúrgicos de Tierra del Fuego, pasando por la tenaz lucha de los trabajadores del Garrahan.
Estas luchas se dan en el marco de la debacle del gobierno libertario, que debió ceder las riendas del gobierno al FMI a partir de un nuevo acuerdo de sumisión semicolonial. Los dólares del FMI sólo compran tiempo para Milei, sus aliados y sus cómplices en las gobernaciones, en el congreso y también en la conducción de los sindicatos. El deterioro de las condiciones de trabajo y de vida de nuestra clase empuja a franjas cada vez más grandes de trabajadores a salir a la lucha para dar respuesta, a pesar de la entrega de la burocracia sindical de la CGT y las CTAs.
Ante esta situación, es tarea de las organizaciones obreras combativas agrupar a todos los luchadores y sectores opositores para orientarnos en la necesidad de recuperar nuestros sindicatos de manos de la burocracia, sin cuyo sostén no podría explicarse la supervivencia de la nueva casta de Milei en el poder. Los que declaman que “no hay clima para un paro nacional” (Daer) y festejan que la justicia evite que el gobierno meta un decretazo antihuelga mientras negocian por abajo la reforma laboral, son los enemigos en nuestras propias filas que vienen traicionando lucha tras lucha; llamando de vez en cuando a paros aislados que no garantizan en las fábricas y lugares de trabajo, acatando las trampas del Estado como las conciliaciones obligatorias y, como gran orientación, pretendiendo llevar el malestar social a una mal entendida “lucha política” que no es más que hacerle campaña a los candidatos del peronismo para intentar recomponerlo de su crisis. El gobierno de LLA se ha mostrado como una verdadera dictadura policial contra nuestra clase para defender los intereses del empresariado, sobre todo de su ala más ligada al imperialismo yanqui, y en una semicolonia como Argentina, necesita los servicios de la burocracia sindical para desorganizar las fuerzas de la clase obrera.
Es necesario combatir a la burocracia sindical, sin dejarnos arrastrar por los discursos de una unidad antimilei sin principios con sectores patronales como las Pymes, los “industriales nacionales” y el peronismo/kirchnerismo en debacle. Las políticas orientadas a desarrollar la mera espontaneidad de los movimientos son incapaces de superar este enorme escollo, ni hablar de quienes proponen la movilización con el único objetivo de exigir y presionar a la CGT para que salga “a luchar”. En la vereda opuesta, la línea de las autoconvocatorias en el sentido de dar la espalda a las organizaciones que la clase obrera ha puesto en pie durante más de un siglo de historia sólo pueden conducir a la impotencia y a la frustración.
Desde la COR, hacemos un llamado a las organizaciones obreras recuperadas y a las corrientes revolucionarias a desarrollar una discusión programática, que debe tener arraigo en las fábricas y los lugares de trabajo, con el objetivo de agrupar a la vanguardia en una oposición sindical revolucionaria con libertad de tendencias que se proponga recuperar los sindicatos. La crisis internacional, la escalada guerrerista del imperialismo, el genocidio a la luz del día que comete Israel en Gaza, el posicionamiento antiobrero y proimperialista de Milei, el ataque en toda la línea desatado por las patronales, muestran la urgencia de este llamado. No existen atajos, son ellos o nosotros. El plenario provincial de trabajadores de Córdoba puede convertirse en una instancia inicial para abrir y desarrollar esta tarea.
Para construir una oposición capaz de enfrentar a la burocracia es necesario organizarse en los lugares de trabajo. Es allí donde podemos golpear donde más duele a los capitalistas, en la producción, o desorganizar la maquinaria estatal en el caso de los estatales. Es desde allí donde podemos organizarnos para ganar las calles. Por eso es clave introducir este debate programático y de dirección en las estructuras: que los plenarios sean de delegados con mandato de base, lo que además nos dará la posibilidad de pasar a acciones decididas y no sólo en los márgenes de lo que permite la legalidad de los estatutos y la ley de asociaciones sindicales. Las mociones tienen que votarse por mayoría y minoría: la democracia obrera es la que posibilita la verdadera unidad de la clase obrera en combate.
Los mecanismo que atan las organizaciones obreras al Estado burgués han quedado al desnudo en los últimos meses por la propia experiencia de las luchas: paritarias no homologadas, conciliaciones obligatorias para frenar, o intentar frenar los paros (UOM, UTA, Garrahan), protocolos antipiquetes y antimarchas (el de Bullrich y los que meten los diferentes gobernadores como ahora quiere hacer el peronista Llaryora), intentos de restringir las huelgas, imposición de los estatutos sindicales de la burocracia para ilegalizar medidas de fuerzas o imponer acuerdos a la baja como en el caso de la propia UEPC con su repudiada asamblea de delegados departamentales. Por eso proponemos como moción: Abajo la ley de asociaciones sindicales. Rechazo a los mecanismos de conciliación obligatoria, fuera las manos del gobierno de las negociaciones paritarias. Contra los estatutos de la burocracia, ¡paro y plan de lucha! Para enfrentar los protocolos represivos y las leyes antihuelga, ¡organizar la autodefensa de los trabajadores!
Las patronales lloran, dicen que están en crisis, que por eso abren los programas de retiros voluntarios y jubilaciones anticipadas, los PPC, y avanzan en suspensiones y despidos. Abramos los libros contables, para conocer la magnitud de esa supuesta crisis empresaria y en todo caso para que sometamos al balance histórico la inviabilidad de un sistema basado en todo tipo de maniobras financieras y más en general en la apropiación privada del trabajo ajeno. El control obrero de la producción es otro aspecto fundamental a desarrollar para combatir el ataque patronal, controlando los ritmos de trabajo y las imposiciones despóticas de las empresas.
Las patronales, envalentonadas por la política del gobierno, pretenden descargar la crisis sobre nuestras espaldas a partir de una reforma laboral de echo que quieren convertir en ley. Mientras, arrecian los despidos, el trabajo fuera de convenio y las ofensivas para flexibilizar los turnos y las condiciones de trabajo. Es el caso de FATE, que impuso los turnos americanos, siguiendo el ejemplo de las automotrices (VW, Toyota) y de tantas otras patronales industriales. A su turno, los sistemas de premios y presentismo, aplicados tanto en el sector público como en el privado, son utilizados para dividir nuestras filas, quebrar la negociación colectiva y atacar el salario. Frente a esta intentona, debemos ponernos en pie de guerra para imponer las escalas móviles de horas de trabajo y salarios, que no sólo permitirían enfrentar los despidos y la desocupación (junto con escuelas de oficios organizadas por los sindicatos), sino que plantean la transición al sistema de trabajo de una sociedad socialista, donde la producción se organice sobre nuevas bases sociales. Ante los despidos, tenemos que tomar las fábricas y las reparticiones estatales, siguiendo el ejemplo de los metalúrgicos de autopartes Crucianelli.
Las medidas de ajuste de Milei y el FMI golpean duro a ramas enteras de la economía, principalmente de la industria. Esto da aire a las viejas recetas que plantean defender la “industria nacional”, consigna que hermana a la UIA y a la CGT. Es decir, nos llaman, como la burocracia de la UOM, a bloquear los puertos para cerrar las importaciones para defender a nuestras propias patronales. ¡Total independencia de la clase obrera frente a la burguesía y sus agentes! Nuestros verdaderos aliados son los trabajadores de Brasil, del resto del continente y de todo el mundo, con quienes estamos llamados a enfrentar al imperialismo y en general a este sistema putrefacto.
Convocamos a los delegados y activistas combativos de la industria, los servicios y estatales de Córdoba a participar del plenario provincial de trabajadores del 12 de junio con esta perspectiva. También llamamos a las corrientes de la izquierda y a los sectores opositores y combativos de la clase obrera de todo el país a tomar el ejemplo de Córdoba y poner en pie plenarios provinciales donde nos organicemos para tirar abajo a la burocracia sindical, romper la tregua y enfrentar el plan antiobrero de Milei y el FMI armados con un programa obrero de salida a la crisis.
El próximo martes 22 de abril la Asociación de Docentes e Investigadores de la Universidad Nacional de Córdoba (ADIUC), sindicato de base de CONADU, renueva autoridades. Se presentan dos listas, la lista Naranja que representa al oficialismo de la burocracia sindical que no hizo más que estar todo el 2024 y lo que va del 2025 sin un plan de lucha serio que rompa con el estatus quo universitario y con los rectores del CIN. Quizá con la intención de orientar su política con promesas de tipo “hay 2025” o “hay 2027”, haciendo campaña por el ala kirchnerista del régimen universitario en las próximas elecciones de mayo. Las esperanzas del rearme peronista es lo último que pierden. Y por otro lado está la lista Roja y Negra que agrupa a la oposición docente, conformada por activistas independientes y docentes de la izquierda, de diferentes facultades y colegios pre universitarios, que desarrollaron una experiencia común en la última lucha.
Esta elección gremial está atravesada por una convulsionada situación internacional mientras el tandem Milei-Caputo se votan una mayor sumisión al imperialismo y toma un nuevo préstamo del FMI a costa de endeudar a las generaciones futuras; con una devaluación encubierta, un fuerte aumento de precios y un nuevo régimen cambiario para sus amigos los especuladores. A un año y medio de gobierno, el presidente no puede mostrar ninguna mejora en las condiciones de vida de las masas trabajadoras, por el contrario aumentan las suspensiones y despidos en la industria, estatales y servicios y el ataque salvaje al salario y las condiciones de trabajo.
En la UNC la situación es igual de preocupante, el presupuesto sigue siendo el del 2023 y esto es producto de la acción decidida de las autoridades universitarias que bancan el ajuste y de la complicidad de las conducciones burocráticas de los sindicatos docente y nodocente. El rector Boretto y los decanos, ya sean oficialistas u “opositores”, echan mano a la menemista LES para el autofinanciamiento mediante acuerdos con empresas, arancelamientos, venta de bienes y servicio. El resultado de esta política será una mayor elitización de la educación, sostenida por trabajadores con salarios por debajo de la linea de la pobreza, con décadas de precarización laboral que se agravan cada año, gobierne quien gobierne el régimen universitario.
La lucha universitaria del año pasado, dejó una de las más importantes lecciones al activismo y es que para dar por tierra con este plan de ajuste y sumisión al FMI, debemos recuperar nuestras organizaciones, con total independencia de las autoridades universitarias, poniendo en cuestionamiento su podrido régimen. Discutir un plan de lucha por la reapertura de la paritaria, un salario del cargo testigo igual a la canasta familiar indexado mensualmente a la inflación, el fin de la precarización laboral y el trabajo gratuito y por el aumento de presupuesto educativo y de ciencia y técnica. No al pago de la deuda. El FMI, afuera.
La lista Roja y Negra quedó conformada así como una lista antiburocrática y combativa y por eso llamamos a votarla críticamente en las próximas elecciones para recuperar el gremio de manos de Blanco, Medina y cía. Nuestro voto es crítico porque la integran viejos componentes del régimen universitario como Raúl “el gato” Gómez, dirigente del MST y ex vicedecano de la facultad de Psicología, que codirigió la mencionada facultad junto a la candidata de Libres del Sur, Patricia Altamirano. Libres del Sur es parte del frente que gobierna la provincia de Córdoba con Llaryora a la cabeza, el gobierno del ajuste a los salarios estatales y a las jubilaciones, del gatillo fácil, de la persecución a los dirigentes estudiantiles, sindicales y piqueteros, de los ñoquis en la legislatura y de las grandes prebendas a las empresas imperialisats como Renault, Stellantis y VW. El MST ya cruzó la barrera de clases hace rato, ni hablar cuando estuvieron en alianza con el hoy mileista Luis Juez, y nunca se avergonzaron de eso. El pasado 24 de marzo, se fueron detrás de la burocracia sindical y los organismos de DDHH cooptados por el gobierno de Llaryora con la excusa de un frente anti Milei. Se trata de un elemento hostil a la independencia de clase y debemos advertir al activismo. La lista plantea como uno de sus puntos más jerarquizados la independencia de las autoridades, algo fundamental, pero tienen que llevar este posicionamiento hasta el final haciendo una revisión del accionar de los candidatos que la componen para que ese pronunciamiento programático no quede sólo en el papel.
La lista Roja y Negra debe hablar con claridad ante el activismo docente y ponerse a la cabeza a sabiendas que para enfrentar el ajuste debemos enfrentar a Milei, Boretto y a los decanos para organizar junto a los trabajadores estatales, industriales, de servicios, desocupados y jubilados un congreso de delegados con mandato de base que discuta el programa de salida a la crisis que de por tierra el acuerdo con el FMI. También deberá pelear porque la Lista Roja y Negra se ponga a la cabeza de organizar al conjunto de la docencia universitaria en todo el país para impulsar un plenario nacional de delegados de la oposición docente, con mandato de base y una perspectiva de lucha por recuperar y unificar a las Federaciones Docentes y por una federación sindical única de trabajadores universitarios y de ciencia y técnica.
Este 22 de abril, llamamos a votar críticamente por la lista Roja y Negra.
El 23 de abril, vamos al paro nacional de docentes universitarios. La lista Roja y Negra puede ponerse a la cabeza de organizar un paro contundente en todas las dependencias de la UNC.
Por Mercantiles de la COR.
La Federación de Empleados de Comercio, con Armando Cavalieri a la cabeza, cerró con las cámaras empresariales un aumento paritario de 5,1%, luego de un largo letargo, donde desde el mes de diciembre los trabajadores de comercio vienen exigiendo y reclamando la reapertura de paritarias. La paritaria firmada a fines de enero implicaba un miserable aumento del 1,7% en 3 cuotas cada una, mientras que la acumulación de la inflación viene superando ampliamente lo acordado por la burocracia: 2,2 en enero y se espera un 2,3 en febrero ( tomando los datos del INDEC). La pérdida salarial es enorme. En tanto que Cavalieri, firmaba y se subordinada a las patronales, el gobierno de Milei usó al gremio más grande del país ( 1.2 millones de afiliados ) cómo paritaria testigo. La careta de que los salarios " le ganarían a la inflación" se caía antes de cerrar la paritaria. Nada más lejos de eso, este gobierno conjuntamente con los pulpos supermercadistas son los responsables, en gran parte, de la remarcación de precios donde día a día la masa trabajadora ve licuados sus salarios por la inflación.
Sin embargo , además del retraso salarial, en comercio existe una realidad que cada día se hace más palpable. Comercio es el globo de ensayo de todas las reformas antiobreras que desea ejecutar el gobierno libertario. Las patronales supermercadistas avanzan con despidos en aquellos lugares donde existe mayor antigüedad. En los primeros meses del 2025 realizaron despidos en Cencosud S.A. ( Easy, Jumbo, Vea , Disco, Unicenter, etc. ),en diferentes mayoristas ( Vital , Jaguar) y en la cadena Carrefour. Las personas con antigüedad comienzan a ser reemplazadas por jóvenes trabajadores totalmente precarizados, que ingresan con la nueva legislación laboral: multifunción, contratos ultra-reducidos, período de prueba extendido, etc. Es necesario entablar puentes con estás masas de jóvenes trabajadores que ingresan a los mercados, debemos unir la brecha generacional, exigir al sindicato que no permita la ultra-explotación a la que se ven sometidas las bases de jóvenes trabajadores.
Las reacciones han sido dispar, delegados de zonas, mandatados por las bases, salieron a dar pelea a los despidos. Sin embargo, la burocracia de comercio boicotea toda lucha que intenta prosperar.
Las luchas por la reincorporación, que se llevaron adelante en Mayoristas, Easy, Jumbo ,etc. Son una tendencia que debemos profundizar, Aquellos que ingresan con pésimas condiciones laborales y aquellos compañeros con antigüedad, con ciertas conquistas son el blanco de ataques permanentes. Debemos unirnos y dar la pelea a las patronales que apuestan por el “recambio” de sus planteles de trabajadores, con el objetivo de cristalizar la nueva legislación laboral burguesa.
Pero no debemos confundirnos, la burocracia de Comercio se siente a sus anchas, está cómoda con el Gobierno de Milei, fundamenta su inmovilismo y pasividad, con la excusa de que ahora “ no se puede hacer nada” , “la ley está de su lado” . Ninguna ley burguesa estuvo del lado de los trabajadores, ni con los libertarios ni los peronistas. La burocracia cumple su rol, meter al Estado en nuestras luchas, en nuestras paritarias, en las negociaciones.
Es necesario confíar en nuestras propias fuerzas, somos nosotros , los trabajadores, los que generamos sus ganancias, debemos ser nosotros los que controlemos y planifiquemos el trabajo mercantil , desorganizarlos en nuestra estructura, realizar asambleas, quites de colaboración, medidas de fuerzas, pero hay que construir urgente una oposición que pelee por la dirección de los SEC. Ninguna conquista puede defenderse si no le arrebatamos a la burocracia nuestra organización.
Es necesario profundizar las experiencias de lucha que se vienen dando (Vital, Easy, Jumbo etc.), consolidar estas expresiones genuinas en una oposición consciente, y con un programa obrero, hacia adentro del sindicato que le dispute la dirección del gremio a la burocracia. Ante está nueva avanzada patronal precarizadora, debemos ser nosotros, los trabajadores y delegados combativos organizados quienes impongamos nuestras condiciones. Es necesario llamar a asamblea en cada lugar de trabajo, sacar mandatos y llevarlos a un gran plenario de delegados y activistas dónde votemos un plan de lucha y que tipo de aumento queremos. Debemos imponer la figura de DELEGADO PARITARIO con mandato para conquistar nuestras reivindicaciones y así ampliar nuestras funciones , se deben poner un límite a los contratos part Time , a los contratos por agencia, debemos exigir la reincorporación de los despedidos cómo también que se garantice la fuente laboral de los trabajadores de Comercio.
ASAMBLEAS EN CADA MERCADO!!
PLENARIOS DE DELEGADOS!!
DELEGADOS PARITARIOS CON MANDATO DE ASAMBLEA!!
POR UN PLAN DE LUCHA MERCANTIL NACIONAL!!
PONGAMOS EN PIE UNA OPOSICIÓN REVOLUCIONARIA DENTRO DE LA FEDERACIÓN!!
El Frente Sindical Universitario convocó a un paro de 48 hs. para el 17 y 18 de marzo. Esto, luego de que el gobierno nacional impusiera un aumento por debajo de la inflación para enero y febrero, de 1,5% y 1,2% respectivamente, en línea con el ajuste que implica el presupuesto reconducido de 2023. Esto, partiendo de la pérdida histórica del salario que venimos sufriendo desde aquel año. El alineamiento automático con EEUU e Israel, como se ha constatado en las votaciones en la ONU, y los avances del acuerdo con el FMI, presagian aún mayor ajuste para el resto del año. La salvaje represión del miércoles 12/3 a la marcha de los jubilados y otros sectores que los apoyaban confirma que este gobierno no dudará en implementar los métodos de una dictadura policial para llevar adelante su plan. El calendario electoral, por otra parte, pone a los rectores y decanos y a la burocracia sindical a apostar todo a la vía electoral-parlamentaria, es decir, a intentar encausar la lucha urgente por el salario y las condiciones de trabajo a un lejanísimo “hay 2027”.
Las conducciones de las federaciones CONADU, CONADU H, FATUN, FEDUN y sus socias menores, han comenzado el año como si la lucha partiera de cero, volviendo a las medidas “iniciales” de “concientización” y las “visibilizaciones” impotentes, a los paros sin deliberación de los trabajadores ni preparación en las facultades. Pretenden así borrar de un plumazo toda la experiencia de lucha y organización que fue adquiriendo un sector del activismo durante el año pasado. Por el contrario, más allá del receso por el calendario académico, existe una continuidad en nuestra pelea: hay que retomar las experiencias más avanzadas como los paros totales y las tomas de facultades, y a partir de ahí profundizar las medidas y avanzar en lo que quedó pendiente, como la recuperación de los sindicatos y las organizaciones estudiantiles de manos de la burocracia sindical y de las agrupaciones afines a la UCR, el PJ y demás partidos patronales y la consolidación de un paro educativo nacional de todos los niveles. Esto último es importante, porque no sólo Milei ataca a estudiantes y trabajadores de la educación, sino también los gobernadores de todos los colores políticos, incluyendo a Kicillof, el favorito de la burocracia sindical y los progres venidos a menos.
Las autoridades universitarias agrupadas en el CIN ya han mostrado de sobra su rol en la lucha. Son parte del elenco político patronal (la casta vieja), ya sea de la UCR, el PJ o alguna de sus variantes o desprendimientos. Sólo posaron de combativos para entrar en algún negocio parlamentario con Milei (la nueva casta), obteniendo alguna migaja presupuestaria a cambio de votar la ley bases o alguna otra medida antiobrera del gobierno. Este año, con el calendario electoral en el horizonte, probablemente jueguen el mismo rol: sumarse a la lucha, por invitación de las burocracias sindicales, sólo para presionar y “desgastar” al gobierno para favorecer a sus candidatos, pero al mismo tiempo intentar controlarla o directamente frenarla como sucedió el año pasado con las tomas y la continuidad de los paros escalonados.
Lo que queda claro es que, ante el recorte presupuestario salvaje, las autoridades vienen adaptándose a la miseria y metiendo el ajuste puertas adentro de cada Universidad y Facultad a través de la aplicación de todo el arsenal de medidas que habilita la menemista Ley de Educación Superior (LES), buscando fondos propios con todo tipo de acuerdos con empresas y entidades, incluso avanzando con más arancelamiento, venta de bienes y servicios, y profundizando la precarización laboral con contratos, monotributos, becas, interinatos, etc.. Ni hablar del deterioro de la infraestructura y los equipos de investigación. Para que nuestra lucha triunfe, es necesario desarrollarla con total independencia de las autoridades del régimen universitario.
Los trabajadores docentes y nodocentes así como los estudiantes de las Universidades Nacionales tenemos planteada la tarea de enfrentar a este gobierno estafador y felpudo del imperialismo yanqui paralizando las universidades y cuestionando el carácter de clase de la educación. Por supuesto, para derrotar a Milei y tirarlo abajo es imprescindible la intervención del conjunto del movimiento obrero, especialmente del proletariado industrial más concentrado, con quienes debemos buscar unificar la lucha. Para eso, es necesario romper con las direcciones burocráticas de las federaciones de trabajadores universitarios y sus sindicatos de base, que vienen haciendo de correa de transmisión del CIN y por esa vía, transigiendo con Milei y su motosierra. También es necesario enfrentar a las direcciones estudiantiles ligadas a los partidos del régimen. Organicemos asambleas en cada facultad, por comisión, curso y/o carrera, elijamos delegados con mandato e impulsemos asambleas interclaustros para deliberar cómo garantizar un paro contundente este 17 y 18 de marzo. Un paro contundente significa sin clases virtuales ni guardias mínimas del sector nodocente. El movimiento estudiantil puede jugar un rol importante con las tomas, garantizando así la paralización total de las actividades. Es necesario además desarrollar un plan de lucha para dar continuidad a nuestra pelea contra un gobierno que va por todo.
Recuperemos nuestras organizaciones, superemos las divisiones que nos quiere imponer la burocracia sindical y avancemos hacia un sindicato único de trabajadores de la educación, ciencia y tecnología. Por organizaciones de base y cuerpos de delegados votados en asamblea para barrer con la burocracia estudiantil de los centros y federaciones. Construyamos una corriente revolucionaria docente-nodocente-estudiantil en la universidad, con libertad de tendencias, para dotarnos de una dirección capaz llevar la lucha a la victoria.
La tormenta que atravesó el país el 7 y 8 de marzo dejó a varias localidades inundadas, siendo la ciudad de Bahía Blanca en la Provincia de Buenos Aires la más afectada. Al momento de escribir esta declaración, se contabilizan 16 fallecidos y un número creciente de personas con paradero desconocido. También la ciudad de San Miguel de Tucumán sufrió una grave inundación.
Los sindicatos docentes y nodocentes, al igual que los centros de estudiantes y federaciones universitarias de todo el país deben ponerse a la cabeza de la solidaridad de clase con los trabajadores y estudiantes afectados. Organicemos la recepción y acopio de productos necesarios para los afectados y viajes a los lugares para hacer entrega de la mercadería a las organizaciones docentes, nodocentes y estudiantiles de esas localidades.
El gobierno de estafadores libertarios comenzó el año elevando la presión para mantener los salarios obrero por debajo de la inflación. Ni hablar de la recuperación de lo perdido desde diciembre de 2023. Su discurso anti Estado es otra de sus estafas: a través de la secretaría de trabajo, aplica todo el peso de la legislación laboral para negar la homologación de todo acuerdo de rama que no sea del gusto de Caputo y Milei. Todo en beneficio de las patronales, que así no están obligadas a pagar incluso los míseros acuerdos que negocia con las conducciones sindicales.
El caso más resonante es el de los metalúrgicos. El secretariado nacional, con Abel “Chamullo” Furlán a la cabeza, bajó tres veces las pretensiones para cerrar el acuerdo salarial pendiente desde noviembre de 2024. Sin embargo, aún cuando luego de esas agachadas las cámaras patronales firmaron el acuerdo paritario, a la fecha la secretaría de trabajo alega “cuestiones de forma” para no habilitar la homologación. Así, los metalúrgicos no recibimos aumento nominal de nuestros magros sueldos desde octubre del año pasado. Esto significa que el salario en términos reales, es decir, medidos por su poder adquisitivos, se reducen mes a mes al ritmo de la inflación. Y hace rato están en la lona.
La burocracia sindical patalea y saca comunicados. Lo mismo que hace con la denuncia de las decenas de miles de despidos y suspensiones en la rama producto de la crisis económica a que lleva la política recesiva del gobierno nacional, bancado por los gobernadores y la casta del congreso. Y nada más que eso, ni una medida de fuerza para imponer a las patronales el aumento que necesitamos los metalúrgicos, sobre todo los de la rama 17 que no llegamos a la mitad de la canasta de consumos mínimos mensuales calculada por ATE INDEC en $1.600.000 al mes de enero.
En la seccional Córdoba, Urbano no se sale del libreto: los reclamos y quejas abundan pero a la hora de pelear contra los despidos en las diferentes empresas, no saca ninguna medida conjunta y deja a los compañeros y delegados peleando fábrica por fábrica, ¡como si la crisis no fuera generalizada para toda la rama! Ni hablar de salir a pelear por el aumento igual a la canasta básica, como se ha planteado en los congresos seccionales; ni siquiera hay voluntad de imponer el pago de lo ya firmado a las empresas.
Cuestionar la intervención del Estado en las relaciones laborales va en contra de la ideología y de los propios intereses de la burocracia sindical peronista. Por eso, no pueden enfrentar el techo salarial impuesto por Milei y su gobierno a través de la no homologación de acuerdos, ni la imposición de conciliaciones obligatorias para bloquear las medidas de fuerza de los trabajadores. El Estado juega para las patronales, la burocracia sindical que dirige los gremios es la tercera pata de esa Santa Alianza.
La situación no da para más. No podemos permitir más despidos, ni acuerdos de rebajas salariales y suspensiones para que la crisis la paguemos los metalúrgicos, ni seguir viviendo con un salario de miseria. Es hora de enfrentar la injerencia del estado en la paritaria y sacarnos de encima a los burócratas como Furlán que no mueven un dedo para mejorar nuestra situación.
Impulsemos asambleas en las fábricas, mocionemos la necesidad un congreso de delegados metalúrgicos con mandato de base para votar un plan de lucha por la reincorporación de todos los despedidos, basta de despidos y suspenciones, efectivización de los contratados y trabajadores de consultoras, pago inmediato de todos los montos acordados, pase al básico de los premios (presentismo, productividad, incidencias, etc). Para enfrentar los planes de crisis de las empresas, impongamos las escalas móviles de horas de trabajo y salario, con un salario inicial mínimo igual a la canasta básica. Si las empresas lloran que están en crisis, impongamos la apertura de los libros contables.
En cada seccional, cómo es el caso de Córdoba, podemos iniciar la lucha impulsando congresos regionales de delegados con mandato para romper la pasividad de los burócratas cómo Urbano, que se escudan en la inoperancia de Furlán y el secretariado nacional y esperan que los problemas se resuelvan por la buena voluntad de un gobierno nacional que odia a la clase obrera y no da pisada sin pedir permiso a EEUU y el FMI.
Recuperemos la UOM y la CGT. Impongamos la voluntad de las fábricas para acabar con este desastre. Vamos al paro nacional metalúrgico y a un plan de lucha por el salario y contra los despidos.
La multinacional Linde Praxair, líder mundial en producción de gases industriales y medicinales, y proveedora de las grandes industrias siderúrgicas y metalmecánicas en Argentina, en un ataque antisindical busca despedir a 6 activistas y referentes de la planta de Pacheco, varios ex miembros de la comisión interna, pertenecientes al sindicato químico de Buenos Aires (SPIQyP).
En la planta de Pacheco, objetivo del golpe de la patronal, es donde hace 20 años por primera vez se puso en pie una comisión interna (Praxair). Tras la fusión, después de 2020, entre la estadounidense Praxair y la alemana Linde, y a tono con el gobierno de Milei, la patronal ha lanzado esta ofensiva, que incluirá, por supuesto, avanzar sobre las conquistas.
La respuesta obrera fue importante, con casi cinco días de huelga la semana pasada, en una lucha conjunta de los trabajadores de los 5 establecimientos ubicados en el conurbano, que se ha convertido en referencia de lucha. Decenas de organizaciones sindicales y políticas se han acercado a las puertas y participado de las convocatorias de la comisión interna. También se han realizado acciones con volanteos en Puerto San Martín (San Lorenzo, Santa Fe), donde Praxair ha enviado producción y no hay delegados en planta.
La patronal ha citado al sindicato químico y a la comisión interna a una reunión para este lunes (10/2/25), pero puso como condición el levantamiento de las medidas para llevar una propuesta. Los trabajadores han votado un impasse hasta el resultado de la reunión, pero planteando y dejando en claro que continuarán las acciones si no hay repuesta favorable para las reincorporaciones. Para ese día convocan desde las 6 am a concentrar en Panamericana y 197, para realizar una conferencia de prensa y movilizar a las puertas de la fábrica, donde será la reunión.
Esta ofensiva, que es de conjunto contra toda la clase, se da porque la CGT y la CTA están entregadas y no convocan a una sola medida de lucha. La burocracia sindical peronista no puede sacar más que meras declaraciones de apoyo, pero son cómplices de Milei y buscan que los trabajadores no intervengamos con nuestro peso en la producción, diluyendo a la clase para ir tras una salida electoral dentro de régimen burgués.
Los trabajadores debemos confiar en nuestros propios métodos de lucha y en un programa obrero, que plantee, para empezar, que frente a los despidos y la llamada “crisis industrial” o de demanda se imponga en cada rama y sindicato la escala móvil de horas y salarios, para imponer a las patronales la organización de la producción y los tiempos de trabajo en función de la defensa de todos los puestos de trabajo a costa de sus ganancias, así como la incorporación de los desocupados a la producción.
En Zona Norte del AMBA, uno de los principales cordones industriales del país, donde se vienen dando o ya están sucediendo importantes peleas que pueden constituirse un jalón para toda la clase, como el Sutna Fate y las otras plantas, Praxair, Toyota, SanCor, de los estatales y la salud, está planteada la necesidad de una convocatoria por parte de los principales sindicatos y organizaciones obreras en lucha a un plenario de delegados con mandato de la región, precedido de una agitación en todas las fábricas, para preparar un plan de lucha conjunto. Este ejemplo debe ser extendido a todo el país, con el norte de imponer un paro general para derrotar a Milei, contra la entrega de las burocracias de la CGT y CTA, en la pelea por recuperar los sindicatos y centrales.
Los trabajadores de Petroquímica Río Tercero (PR3) están dando una durísima lucha contra los despidos y el lockout patronal desde hace casi un mes. A través de maniobras arteras, la patronal logró sacarlos de la planta y cerrar las puertas con candado para luego alegar que la principal línea de producción, la de Diisocianato de Tolueno (TDI), es económicamente inviable por la competencia de superplantas instaladas en China y que por lo tanto pretende cerrarla de forma permanente. Al momento, son 125 compañeros los que han recibido la notificación de despido, a los que hay que sumar más de 60 trabajadores de tercerizadas encuadrados en la UOCRA. Además, penden de un hilo decenas de puestos de trabajo de la planta que Fabricaciones Militares (FM), recientemente convertida en Sociedad Anónima Unipersonal, tiene en la localidad, ya que es proveedora de insumos para el TDI de PR3.
Los trabajadores, organizados en el sindicato de Químicos y Petroquímicos de Río Tercero, mantienen un acampe frente a los portones de la fábrica y han convocado ya a dos multitudinarias marchas por las calles de la ciudad. También han desplegado su solidaridad con otras luchas en curso en la provincia, como la de los jubilados, los estudiantes y trabajadores de la UNC y los estatales provinciales que enfrentan los descuentos de Llaryora.
En esta comprensión de que para triunfar la lucha no tiene que quedar aislada, los petroquímicos han recorrido diferentes sindicatos buscando el apoyo de las organizaciones del movimiento obrero, aunque en general el apoyo de las conducciones sólo ha sido de palabra. Si bien algunos sindicatos participaron de las marchas en Río Tercero, la burocracia sindical cordobesa, ella misma dividida en dos CGTs y dos CTAs plagadas de internas, no ha realizado ninguna acción contundente contra los despidos y suspensiones, no sólo en PR3, sino en una multiplicidad de fábricas, establecimientos, comercios y reparticiones estatales a lo largo y ancho de la provincia. Incluso, en el acto del 30 de octubre contra la venida de Milei a la provincia, directamente bajaron del palco a los representantes del sindicato químico y no los dejaron hablar. No es de extrañar esta posición de la burocracia sindical, ya que, además de los múltiples vasos comunicantes que la unen al gobierno del peronismo provincial y sus aliados, a nivel nacional son parte de una burocracia que se divide entre quienes lanzan medidas aisladas de vez en cuando para descomprimir como forma de sustentar la gobernabilidad y quienes directamente pactan la reforma laboral, el RIGI y la Ley Bases con Milei.
El miércoles 6 de noviembre, los petroquímicos organizaron un plenario en la sede de Luz y Fuerza en Córdoba Capital para discutir las perspectivas del conflicto con organizaciones sindicales, sociales y políticas, una buena iniciativa de la que fuimos parte. Nuestra posición en el plenario, además de discutir los problemas estratégicos que coloca frente a nuestra clase el brutal ajuste fondomonetarista que está llevando adelante el gobierno nacional y su alineamiento obsecuente con el imperialismo yanqui e Israel, se centró en la necesidad de unir las fuerzas de nuestra clase contra el ataque patronal. Propusimos dar una pelea para poner en pie un plenario de delegados de base con mandato con miras a un Congreso de delegados de trabajadores ocupados y desocupados, de la industria, los servicios y estatales, junto a los jubilados y el movimiento estudiantil, para discutir las medidas y los métodos que necesitamos imponer para triunfar. Se hace necesario discutir un programa obrero de salida a la crisis, que enfrente los engaños institucionales del ministerio de trabajo, las legislaturas o los gobierno nacional y provincial. También planteamos que aquellas conducciones que apoyan la lucha contra los despidos en PR3 y sus tercerizadas tienen la obligación de ponerle fecha al Paro Provincial; las condiciones están dadas, como muestran las luchas en curso del SUOEM (municipales de Capital), los docentes, los trabajadores de los hospitales y estatales provinciales, los trabajadores y estudiantes universitarios. Y los motivos sobran, con salarios miserables y cientos de miles de despidos y suspensiones que en todo el país afectan a las diferentes ramas de la economía por la recesión autoimpuesta por el ajuste de Milei y sus socios.
Desde la COR, apoyamos desde el primer día la lucha de los trabajadores de PR3, metiendo en los diferentes lugares de trabajo el debate sobre el conflicto y sus perspectivas y planteando la necesidad de ir a una lucha generalizada por su triunfo. La crisis y el nivel de ataque del gobierno y las patronales ponen a nuestra clase frente a enormes desafíos. Debemos encararlos con valentía, como hacen los trabajadores petroquímicos de Río Tercero con su consigna “todos o ninguno”, negándose a negociar despidos. Su triunfo sería un duro golpe para el plan de las patronales, se trata de una lucha que excede la pelea sindical, se trata de una lucha política contra el gobierno de Milei y quienes lo sostienen.
En enero del 2024, Cavalieri inauguró las relaciones con el gobierno libertario de la mejor manera posible. Mientras miles de trabajadores reclamaban en las calles contra el DNU y la reforma laboral, el pope de comercio se sacaba fotos con la ministra Petovello y le aseguraba que el “fondo de cese laboral” iba a estar en la agenda mercantil. Hace poco, a inicios de agosto, la “buena onda” con el gobierno de Milei sigue firme. Cavalieri fue el único gremialista que envió un representante a la mesa de diálogo social, a pesar de que la cúpula de la CGT avisó que no concurría. Cavalieri le garantizo así “la pata sindical” a esta mesa de diálogo que lo único que busca es avanzar en consensos que deriven en proyectos de Ley, para reglamentar la reforma anti-obrera.
Este acercamiento tan estrecho no es casual. Los libertarios pretenden usar al gremio más grande del país (1.2 millones de afiliados) cómo modelo de la naciente reforma laboral.
La burocracia de comercio tomó nota e hizo bien los deberes. La última paritaria fue un verdadero escándalo. Cavalieri acordó un incremento salarial del 13,5 % en 3 cómodas cuotas que no cubren ni por asomo la galopante inflación impulsada por los aumentos en los servicios, alimentos y transporte. Para colmo, la burocracia volvió a patear para el 2025 la incorporación al básico de todos los acuerdos. Es decir, los aumentos son “no remunerativos” y no devengan para muchos ítems, dejando el sueldo básico por el subsuelo.
La excusa es la misma de siempre, resignar salario y condiciones laborales para “comprender” a las empresas y su merma en las ventas. De esta forma, sin salarios dignos, la Federación inventa el relato de que está cuidando los puestos de trabajo. Pero la realidad es que mientras Cavalieri les cuida la billetera a las empresas, los despidos y ataques a los trabajadores se profundizan.
El primero en hacer punta de lanza, fue la cadena Chango Más, perteneciente a Francisco De Narváez y que vino a suplantar a Walmart. Esta cadena procedió al despido de más de 300 empleados, todos con antigüedad, apenas salió la reforma laboral. En el mayorista Mademax de La Matanza, despidieron a 70 trabajadores en un día. En Carrefour, Coto y Diarco siguen los despidos por goteo. Ante esta situación las diferentes regionales solo pelean por el pago de la indemnización, en algunos casos llevaron acciones adelante, pero todo terminó en conseguir un 20% más de plata. Nunca pusieron en pie un plan de lucha serio. Mención aparte merece el holding Cencosud (Jumbo, Easy, Disco, Vea, Unicenter, Blaisten, etc.), donde la patronal despidió a un delegado combativo (Jumbo Pilar), electo a principio de año y no lo deja ingresar a su lugar de trabajo. Mientras avanzan en recortar beneficios y despiden gente.
Para enfrentar estos ataques es primordial jerarquizar la organización en los mercados y hacia adentro de los SEC. Realizar asambleas, hacer piquetes de convencimiento, recorrer los mercados, llevar mandatos y exigir a las regionales que convoquen a plenarios. Debemos unir fuerzas dentro de nuestra propia organización y dar la pelea desde allí. Lamentablemente los atajos “legales” no funcionan, no podemos ilusionarnos solo con visibilizar los conflictos en la opinión pública o imponer una agenda parlamentaria que trate la “prohibición de despidos” o peor aún, la “doble indemnización”. Nada de eso juega a nuestro favor, solo podemos organizarnos desde adentro de nuestra organización para presentar una pelea seria.
Necesitamos profundizar las discusiones para llevar adelante un programa obrero, que nos articule para crear una oposición que le dispute la dirección del gremio a la burocracia.
ASAMBLEAS EN CADA MERCADO
PLENARIOS DE DELEGADOS CON MANDATO POR CADA REGIONAL
PLAN DE LUCHA NACIONAL PARA REINCORPORAR A LOS DESPEDIDOS Y POR SALARIO= CANASTA FAMILIAR
PONGAMOS EN PIE UNA OPOSICIÓN REVOLUCIONARIA DENTRO DE LA FEDERACIÓN
Mercantiles de la COR
El 16 de julio, el gobernador Llaryora le solicitó al Ministerio de Trabajo de la provincia que dictara la conciliación obligatoria a los docentes de Córdoba, garantizando así el normal inicio de clases el lunes próximo.
La burocracia celeste cómplice del plan de ajuste del gobierno provincial, aceptó dicha conciliación impidiendo que se concrete el paro de 48 hs, votado en la última asamblea de delegados departamentales de UEPC. Recordemos que el plan de lucha definido por la docencia era: paro por 48 hs para el 22 y 23 de julio y el no inicio de clases como consecuencia de una segunda e insuficiente oferta salarial del gobierno provincial.
Claramente el gobernador achica el gasto en consonancia con la política de Milei, dictada por el FMI y a sabiendas que la pérdida salarial del último trimestre ubica a los docentes por debajo de la línea de pobreza, se atreve a declarar públicamente, lo contrario. Además de esta mentira, corroboramos que el cinismo del ejecutivo no tiene límites al declarar que va a “mejorar la propuesta” programando para más adelante los descuentos del Fondo Solidario de Atención para Enfermedades Emergentes e Innovación Tecnológica (FOSAET) y del fondo para la Administración Provincial del Seguro de Salud (Apross). Mientras, trata de ganar tiempo con la conciliación.
No contento con esto, el gobernador se mete en la vida política del gremio con la clara intención de macartear, haciendo responsable a la dirigencia de izquierda de la seccional capital de poner palos en la rueda para que la docencia cordobesa acepte “mejorar el salario”. No debemos aceptar que Llaryora interfiera en la vida interna del gremio. Las diferencias con la burocracia celeste, las enfrentamos a diario organizando en las escuelas: asambleas, plenarios, paros y movilizaciones. Métodos de lucha de nuestra clase, para enfrentar a la burocracia traidora, socia del Estado -patrón.
Diez días hábiles de conciliación a partir del lunes 22 de julio, es lo dictado por Sereno, secretario de trabajo. Debemos rechazar la medida, por su carácter coercitivo porque el gobierno es juez y parte en este conflicto. A su vez, los trabajadores no debemos confiar ni un ápice en las instituciones burguesas, sólo podemos confiar en nuestras propias fuerzas.
La dirección de UEPC capital, recuperada de manos de la celeste, ha declarado su rechazo a la conciliación. Es una gran oportunidad para postularse como dirección alternativa a la burocracia, junto a los delegados departamentales y escolares combativos del resto de los departamentos de la provincia, convocando a un plenario de delegados mandatados de todas las escuelas de la provincia para rechazar la conciliación obligatoria y ratificar el plan de lucha votado en la última asamblea departamental. En esta perspectiva, impulsemos asambleas en cada escuela, y saquemos pronunciamientos públicos de rechazo a la conciliación y de repudio al accionar inconsulto de la burocracia, exigiendo plenario ya!
Es inadmisible que la burocracia celeste, luego de perder la votación de la departamental aún teniendo un estatuto amañado al servicio de sus intereses, acepte pasivamente la conciliación y deponer el plan de lucha. Y como si todo esto fuera poco, en el comunicado oficial pretende amedrentarnos citando la ley de asociaciones sindicales y señala lo riesgoso de no someternos a los designios del Estado-patrón. Debemos aclararle a Cristalli y cía. que el único riesgo que corre nuestra organización sindical es que ellos continúen entregando sistemáticamente a la docencia. Cansados estamos de los paritarios de la burocracia y sus prácticas genuflexas ante el estado, ¡nosotros luchamos y ellos negocian migajas! Es hora de elegir a nuestros paritarios votados en asamblea, con mandato y revocables, para que podamos tomar la negociación salarial en nuestras manos. Enfrentar el ataque en curso al conjunto de los trabajadores es tarea de las seccionales recuperadas y de los activistas antiburocráticos, es necesario señalar el camino para reagrupar a la vanguardia en un debate programático para dar una salida obrera a esta crisis, convocando al activismo de los hospitales y estatales en general para pelear por una Paritaria Estatal Única.
A su vez, en la provincia se desarrollan conflictos tales como la lucha de los trabajadores de los SRT de la UNC con quienes debemos tender lazos de solidaridad activa, al igual que los trabajadores de la industria ceramista que están de paro por la falta de respuestas ante el pedido de mejora salarial. También hay despidos y suspensiones en la industria metalmecánica y automotriz, en medio de un escenario recesivo que debemos enfrentar el conjunto de los trabajadores estatales y privados, imponiendo a la CGT y a las CTA un paro activo provincial para derrotar el plan del FMI, Milei y Llaryora.